PERSECUCIÓN A LAS TERAPIAS ALTERNATIVAS

Bueno, parece que las desgracias nunca vienen solas, como dice el refrán... Tras el fallecimiento de Andreas Moritz, acabo de enterarme de otra injusta persecuciÓn a que están siendo sometidos los seguidores de los procedimientos de salud natural.

En este caso me refiero a eljardindellibro.com. Esta librería online, buena amiga de este blog y una de las mejores de España, especializada en en estos temas alternativos, se ha visto denunciada por la delegación de salud de Huelva por una cuestión muy grave.... tener a la venta ¡sales de Epsom!

Un complemento alimenticio inocuo, y que pueden tomar hasta la embarazadas, que no requiere prescripción médica y que se vende en cualquier herbolario sin problemas, ha sido el objeto de la denuncia. Es algo así como si ahora también prohibieran vender ¡el bicarbonato sódico o las sales de frutas Eno!

Y es que las autoridades ya no saben que  hacer con la excusa de "garantizar" la salud de la gente, para que les compren sus pastilla y sus drogas legales. Todo lo que se pueda resolver de manera natural les molesta en su caza de brujas particular.

Pero en realidad lo que están cazando es la libertad de las personas para elegir los procedimientos para mantener y recuperar la salud. Y eso sí que es grave...

Desde aquí queremos decirles que basta ya de TUTORÍAS sanitarias, como si los ciudadanos fueramos niños inconscientes que no saben lo que hacen con su salud o con su vida. ¡Dejennos tomar nuestras propias decisiones, aunque éstas cada vez estén mas alejadas de sus farmacias! ¡Basta ya de perseguir al que ofrece nuevas alternativas de salud, porque sabemos -y queremos- cuidar de nosotros mismos!

QUEREMOS LA AUTOGESTIÓN DE LA SALUD! Y el que no quiera o sepa, pues que vaya al médico, al chamán o al que cumpla sus expectativas... Pero dejen de meterse en los asuntos de la gente y ocupénse de lo que les competa y respeten el libre criterio de los individuos a la hora de adminstrar su salud y su vida.


Evidentemente, a través de las terapias alternativas no reconocidas por el sistema médico hegemónico, nos persiguen a todos nosotros... porque son procedimientos que no comprenden, ni respetan... sin embargo ¡hay mas cosas bajo las estrellas de las que ustedes conocen!

Sabemos que los estamentos oficiales usan los miedos de la sociedad para amparar su predisposición totalitaria sanitaria. Lo han demostrado con las vacunas, la homeopatía, o las plantas curativas que están retirando del mercado alternativo para entregarselas a los farmacéuticos. Pero el movimiento es imparable, y no podrán domarlo porque cada vez mas gente acude a las terapias naturales para reestablecerse sin efectos secundarios.

El camino está trazado, es duro, pero inevitable. La gente busca su salud cada vez más por la via de la naturaleza y no del laboratorio. Las estadísticas lo confirman cada día más. Quizá ahí esté la raiz de un problema incipiente para el mercado de las drogas legales...

Y por eso sus esbirros han salido a la caza de víctimas propiciatorias. Ya tienen una: eljardindellibro.com, con una costosa multa que les ha obligado a dejar de vender durante meses el pack de la limpieza hepática, llegando a amenazar su supervivencia...

El sistema sanitario en España es tan hegemonico que no comprende que hay otras realidades paralelas que suplen sus imperfecciones, aunque ya hemos dicho que quiza sea precisamente por eso...

Este asunto, requeriria que los colectivos del gremio de la salud natural hicieran un frente comun para -una vez mas- intentar la legalizacion de las medicinas complementarias, algo que ya fue frustrado en su día por los intereses oficialistas en Cataluña, la comunidad mas avanzada en este sentido y que intentó legislarlas.

Desde aquí, esperamos al menos que al divulgarlo, la gente sea consciente de como se las gastan contra los que buscan mas allá del sistema, el mismo sistema que tampoco les resuelve sus problemas de salud, cuando no lo usa para la corrupción como ha sucedido en la Junta de Andalucía. Eso si que no lo denuncian...

Así les va... Así nos va...

Carlos.