No creáis que es simple o sencillo afirmar que una dieta "alta" en grasas y baja en proteínas y carbohidratos es fácil de divulgar, incluso para el gremio médico...
Las élites no se andan con minucias, si les rompes el dogma te afeitan la cabeza...
Sin embargo, Noakes demostró durante los días del juicio que las dietas altas en carbohidratos son un invento de los años 70, un falso mito que ha disparado las tasas de obesidad y diabetes que padecemos actualmente.
LO QUE MATA SON LAS DIETAS BAJAS EN GRASAS Y ALTAS EN PROTEÍNAS!!!
Yo tengo claro cual es el mecanismo por el que el organismo se afecta con una dieta rica en hidratos y proteínas y baja en grasas: el colapso hepático que produce.
El hígado es el laboratorio orgánico donde se fabrica todo tu organismo. Sus cientos o miles de funciones aún no se conocen en gran medida. Si el hígado no recibe abundantes grasas cada día, adiós... las tiene que fabricar él y llegado a un punto se satura y colapsa. Así degenera (cirrosis) y da múltiples problemas en todos los órganos y sistemas, pues los afecta a todos. A cada estado los médicos le pondrán una etiqueta distinta (diabetes, estreñimiento, arritmias, alergias...) pero en origen son todos lo mismo, disfunción y obstrucción hepática. Esa es la verdadera causa.
Comprendí todo esto, tras años de limpiar el higado con aceite de oliva. LLevo muchas limpiezas ya y he visto la importancia de las grasas alimenticias claramente. A muchos de vosotros os he recomendado por correo o facebook aumentar el consumo de grasas para mantener el hígado sano. Ahora, llevo un par de años ya promoviendo también una dieta con un mayor nivel de consumo de grasas y aconsejando la reducción de carbohidratos y por supuesto de las proteínas, que son las que producen la arterioesclerosis y los infartos de todo tipo, cardíacos y cerebrales. La llamo la dieta de Vilanova y es una proporción energética en Kcal fácil de recordar:
Esto quiere decir que si consumimos cada día una dieta promedio de 2.500 Kcal, de los carbohidratos sacaríamos 1.250 Kcal, de las grasas 1.000 Kcal. y de las proteínas sólo unas 250 Kcal.
Algunos quizá se extrañen de que las grasas, incluídas las saturadas, sean muy recomendables para la salud de nuestro organismo. Un falso mito a partir de los manipulados estudios de Ancel Keys en los años 70´s, dió lugar a esta creencia (que cada día está mas fuera de lugar) de que eran las grasas las que producían los infartos. Las grasas en realidad son las que nos protegen porque el colesterol actúa como un pegamento en las arterias (llenas de calcio y proteínas), que de otro modo se desgarrarían rápidamente. El colesterol nos da tiempo para corregir este exceso proteico y que recuperemos nuestra salud arterial. Pero no hacemos caso y seguimos con una dieta alta en proteínas y carbohidratos, con lo que enfermedades como los infartos cada vez son más prevalentes y también las patologías como obesidad, diabetes y candidiasis.
Las dietas bajas en grasas matan, esa es la verdad, y a la verdad le importa un bledo lo que nosotros opinemos al respecto. Ella es.
¿Son muchas grasas el 40%? Depende, la dieta divulgada oficialmente por cuerpos de dietistas recomienda un 30%, pero la Sociedad Británica de Nutrición recomienda ya un 35% como cantidad ideal de grasas a consumir cada día para obtener el total diario de nuestra energía en Kcal.
Yo me asombré mucho cuando conocí el año pasado este aumento de los británicos, que son siempre pioneros en todo, porque venían a reforzar oficialmente mi opinión.
Aún así, yo creo que hay que ir un poco más allá y consumir algo más de grasas, al menos durante una temporada, para mejorar la salud y el peso. Por eso, recomiendo aumentar las grasas al 40% de la energía diaria, independientemente de las Kcal. que queramos consumir que estarán en función de nuestras necesidades físicas.
Es importante, siempre practicar deportes aeróbicos para mejorar el metabolismo y el peso, por supuesto, o si no habrá que tomar menos cantidad de alimentos para adelgazar. Pero las grasas nos saciarán y aportarán sabor a las comidas como nunca. Activarán el hígado y éste recuperará su funcionalidad perdida, lo cual aumentará su rendimiento metabólico y la lipolisis del tejido subcutáneo sobrante. Poco a poco, pues todo en la naturaleza sucede siempre poco a poco. Así le ganarás la partida al aumento de peso que sobreviene con la edad, pero sobre todo, con las dietas basadas en el mito del peligro de las grasas. Es justo al revés.
¿Y qué tipo de grasas? Bueno, pues para mí las ideales son el aceite de oliva, el aceite de coco virgen extra, el aguacate y la mantequilla de vacas que hayan consumido pasto verde (no piensos). Pero si quieres comer otras grasas animales, adelante. El problema es freírlas, no su origen. No frías los aceites ni las grasas nunca.
Y la margarina, de cualquier tipo, tírala a la basura. Es tóxica literalmente. Es grasa vegetal saturada por hidrogenación para solidificarla, a la que añaden color, olor y sabor. Consume mantequilla, es rica y sana, llena de vitamina D.
Baja las proteínas al 10% de tus necesidades energéticas si quieres vivir muchos años. Observa los culturistas y los grandes consumidores de proteínas. Tienen patologías y desgaste orgánico con 50 años que parece que tengan 90. La deshidratación y el exceso de proteínas mata, por mucho deporte que hagas. Nunca el ser humano necesita más de un 7% de proteínas, pues es lo que tiene la leche materna durante el período que más y más rápido crece el ser humano: del nacimiento a los dos años (lactancia). Nunca va a necesitar más que eso. Yo incluso considero un poco más alta esa cifra, subiéndola al 10%.
¿Por qué vivimos más los vegetarianos y envejecemos menos? Básicamente porque llevamos una dieta baja en proteínas. El problema actual es que muchos creen también que las dietas bajas en grasas son buenas para los vegetarianos, y eso aumenta su ingesta de carbohidratos. ¡Cuidado! la bollería y alimentación industrial es muy peligrosa para la salud, aunque seas vegetariano o vegano!
Ser vegetariano ayuda mucho a mantener bien tu estado de salud si consumes suficientes grasas (35-40%) y pocas proteínas (10%), y el resto ya en forma de carbohidratos integrales (50%).
Esta es mi propuesta, mi estilo de vida y de dieta a mis 55 años de edad (2016), después de llevar 35 años de vegetariano activo, y basándome en mi experiencia en salud natural y dietética.
Buscad, comparad y luego decidid por vosotros mismos... pero cuestionaros todo, incluyéndome a mi, porque hay mucha información mediatizada por intereses espurios en todas partes.
Salud-os!
CdV